Londres, -27. — Según una información publicada por el «Times», doscientos habitantes de Pamplona,- han facilitado la evasión de los prisioneros del fuerte de San Cristóbal. Los evadidos, que son en gran parte falangistas, tienen 900 fusiles. Hasta -ahora no han logrado pasar la frontera, pero parece que se avanzan hacía ella, combatiendo contra las tropas facciosas. —
Ag. España.
París, 27. — El corresponsal de «Ce Soir» en Hendaya. dice que se ha entrevistado con un falangista español muy destacado, el cual ha hecho -algunas declaraciones a, propósito de la evasión de los falangistas del fuerte de San Cristóbal. Declara el falangista que el domingo pasado doscientos civiles llegaron, a Pamplona para, libertar a los falangistas y entregarles armas y camiones. El plan de los civiles y los falangistas detenidos consistía en tomar Pamplona, San Sebastián, Bilbao y Santander, dónde estaba preparado un movimiento contra «el traidor Franco». 151 falangista ha declarado qué había un traidor entre los civiles, y las tropas del «traidor Franco» llegaron en el momento en que los ‘falangistas evadidos subían en los autos. Las tropas capturaron a los doscientos civiles, que fueron pasados por las armas.
El falangista, manifestó que los evadidos no pasarán la frontera. Quieren luchar contra,-él traidor Franco, que ha, traicionado la causa falangista». — As- España.
París, 28. — «Ce Soir» publica una interesante información sobre los últimos acontecimientos ocurridos en Pamplona. Afirma dicho periódico que los sublevados en el fuerte de San Cristóbal se encuentran actualmente en el collado de Velate, cerca de la frontera francesa, donde libran verdaderos combates contra sus perseguidores.
El fuerte de San Cristóbal es ana gran fortaleza rodeada de gruesas murallas y muy bien fortificada. Por consiguiente, es difícil escapar de ella sin la complicidad exterior.
El domingo último doscientos falangistas fueron a poner en libertad a los que se hallaban presos, llevándoles armas para defenderse y camiones para huir, según un plan preconcebido.
Según parece, entre los que organizaron el complot figuraba el propio director del fuerte. Los fugitivos de San Cristóbal se proponían en primer lugar apoderarse de Pamplona, y seguidamente, por sorpresa y con la complicidad de los elementos falangistas ya preparados, apoderarse de San Sebastián y Bilbao. Es interesante la narración que sobre el significado del movimiento publica el corresponsal del mismo periódico en Hendaya, quien, en síntesis, escribe:
«Ha venido a verme un joven español, correctamente vestido, con aire febril y exaltado. Al hablarle yo de los «fugitivos» de San Cristóbal, me ha replicado: «Nunca; nosotros no somos fugitivos» — agregando seguidamente —: «Los fugitivos de San Cristóbal son los héroes de la verdadera España. Todos llevan nombres ilustres y son hijos de las más ricas familias del país. Entre ellos figuran varios militares de gran Hombradía. Ahora todo marcha bien; pero el domingo pasado nos hizo traición un hombre.»
Explica sobre este punto que en el momento de salir del fuerte los fugitivos, se hallaban esperándoles ya las tropas de Franco. Los que no pudieron escapar fueron asesinados, y entre éstos figuraban doscientos paisanos de Pamplona. «Los falangistas no quieren ser tratados como fugitivos, ni. refugiarse en Francia, ni tampoco hacerse proteger por el Gobierno de Barcelona.»
Al decir de “mi interlocutor: «¡Falange entabla cómbate por España! «Unas escaramuzas han puesto frente a frente-a las tropas franquistas y a, los falangistas del fuerte de San Cristóbal, en la región de Velate. Los falangistas disponen de unos 800 fusiles y son aprovisionados misteriosamente.
Se afirma que entre los sublevados figura el antiguo jefe de Falange, señor Hedilla.
París, 28. — El1 corresponsal de «Ce Soir» en San Juan de Luz continúa, hablando de los evadidos de Pamplona. Según noticias de procedencia inglesa, los evadidos han sido capturados y muertos, excepto una treintena que se encuentra aún en el monte. Pero e1 corresponsal de «Ce Soir» dice que noticias de la zona facciosa aseguran que los evadidos se encuentran cercados en los montes a 15 kilómetros de la frontera francesa. Agrega el corresponsal que la rebelión de San Cristóbal no es un hecho aislado, y que se pudo producir gracias a que fue llevada a cabo según un plan preconcebido. La censura italofranquista – porque los italianos controlan todo en la España facciosa – no deja pasar noticias de Zaragoza. Naturalmente, circulan rumores según los cuales en Zaragoza se ha producido una rebelión parecida a la de Pamplona; El corresponsal añade que estas rebeliones anuncian acontecimientos próximos y trágicos. En la. España facciosa los antiguos aliados antirrepublicanos se han dividido y se odian. El jefe de los falangistas de Pamplona, Moreno, fue detenido; esta detención provocó protestas de los falangistas, por lo cual fue puesto en libertad. Más tarde fueron detenidos otros falangistas, especialmente después del discurso de Yagüe contra los extranjeros. Según noticias de Londres, también se registró en Málaga una rebelión de falangistas y otros ciudadanos contra los invasores extranjeros. — Agencia España.
Bayona, 2. — Los fugitivos del fuerte de San Cristóbal continúan resistiendo en los montes- Ha habido varios encuentros, y e1 ruido da la fusilería se ha oído desde el territorio francés.
Los fugitivos infligen a las fuerzas que los persiguen pérdidas sensibles. En el curso de un encuentro violento, los perseguidos han tenido 30 bajas entre muertos y heridos. Soldados heridos se presentan todos los días en las poblaciones próximas. En Burguete, dos de ellos murieron a consecuencia de sus heridas. Hay otros cinco en el pueblecito de Zorrigain, muy próximo a la frontera. Los sublevados se organizan lo mejor que pueden en los lugares donde se han atrincherado sólidamente. Disponen de buen número de ovejas, y en las aldeas próximas están provistos de un verdadero stock de harina. — Agencia España.
Madrid, 2.—La delegación de Propaganda y Prensa ha facilitado una información referente al ya célebre fuerte de San Cristóbal, de Pamplona, donde últimamente se han desarrollado hechos que constituyen el comentario de actualidad en Europa.
Iniciado el movimiento fascista contra la República, el fuerte de San Cristóbal recobró su tenebroso destino de otros tiempos, encerrándose entre sus muros a los presos políticos de la zona sometida por los rebeldes, llevando a la prisión largas reatas de presos torturados por las culatas de los fusiles de la guardia civil. Allí se reunió gran número de republicanos a quienes la sublevación sorprendió en Andalucía, Extremadura, Castilla, Aragón, Galicia y Rioja.
Allí fueron sacrificados el ex director de Seguridad don Arturo Menéndez; el ex gobernador de Asturias, señor Bosque; el gobernador civil de Zaragoza, señor Vera, y tantos otros qué cayeron abatidos en las cercanías del fuerte. Hasta las puertas del fuerte llegaban de madrugada las siniestras patrullas que sacaban grupos de veinte o de cincuenta presos que luego aparecían extendidos en los ribazos y en los cruces de la carretera. Personas que han estado entre sus muros más de una vez, calculan que unos diez mil republicanos han sido sacrificados en la forma indicada. Nadie que haya padecido la tortura de esta prisión conserva la salud: el diputado catalán señor Casanelias que estuvo allí encerrado, está todavía sometido a tratamiento. Al producirse el motín registrado hace poco tiempo había en el fuerte unos ochocientos reclusos, en su mayoría militares; gente sencilla de Euzkadi y algunas figuras, tales cómo un hijo del general Miaja y un hermano del ministro señor Irujo; había también algunos republicanos de Rioja que se salvaron de las matanzas de octubre y diciembre en aquella región. Recientemente, por orden dictada por Martínez Anido, muchos presos fueron trasladados desde el fuerte a la cárcel de Pamplona, especialmente falangistas, en abierta disidencia con el general Franco y con Fernández Cuesta, traidor a la propia causa de Falange.
A punto cierto, no se sabe el Verdadero alcance de lo ocurrido en el fuerte de San Cristóbal, pero sí puede afirmarse que las comunicaciones con Navarra están vigiladísimas por fuerzas de unidades extranjeras y de requetés; que en el interior de Pamplona se oyen durante la noche frecuentes tiroteos; que las autoridades han redoblado las medidas que el estado de guerra pone en sus manos; que fue liquidada toda la guarnición del fuerte de San Cristóbal que servia la noche del motín, y que por los montes de Navarra se ha organizado la caza del hombre. En Velate fueron asesinados unos ocho falangistas capturados por las rondas organizadas para la persecución de los evadidos. Lo que es rigurosamente exacto es qué en el movimiento han intervenido únicamente falangistas descontentos y no ha participado ningún elemento afecto a la causa de la República. El movimiento ha sido netamente falangista.